Parece que sí. Nuestro gobierno acompañado por grandes empresarios, nos dice que está tomando las medidas necesarias para sacarnos a flote de la situación económica calamitosa que está sufriendo este país.
Tanta euforia gubernamental, ha asustado al BCE que rápidamente ha subido tipos de interés para que los españoles aflojen sus bolsillos y no gasten tanto, compren menos pisos y coches y así podamos incrementar un poco más el paro.
España es un cadáver económico, pero por lo menos durante los 2 próximos años no será rescatada financieramente. Ahora bien, la clase media con hipotecas, préstamos y con un empleo inseguro, junto con la pequeña y mediana empresa sí tendrán que ser rescatados. Nuestros políticos en vez de tanta tertulia televisiva deberían visitar los polígonos industriales para conocer la realidad de la situación, la actividad en ellos ha caído en picado.
Deberían enterarse que para crecer y para rebajar la tasa de paro, debe haber consumo, bajar impuestos, bajar tipos de interés, crear más gasto público, devaluar para exportar y si Bruselas no se lo permite deberán ser valientes y tomar decisiones que beneficien al país, no vale con rebajar sueldos a los más humildes y subir la edad de jubilación a los que han trabajado hasta la extenuación.
Nuestros dirigentes llevan las riendas de este país sin rumbo ni concierto, esperando lo que nos digan los demás, pero el pueblo parece contento y además en breve tendremos cuatro partidos entre Barça y Madrid.