Los ETF (fondos cotizados en bolsa), van a ser un producto estrella de la banca de inversiones para el año 2009, intentaré resumirlo de forma entendedora:
¿Qué son los ETF?
Son fondos de inversión mobiliaria que cotizan en bolsa. Se parecen a los fondos de inversión tradicionales, están compuestos por una cesta de valores, sin embargo operan como acciones, ya que cotizan durante toda la sesión bursátil y tienen la misma fiscalidad que las acciones.
Los ETF tienen un valor liquidativo a fin del día, pero insisto, disponen de un mercado secundario en el que se pueden contratar como cualquier otra acción.
Su cotización puede variar a lo largo de la sesión según la oferta o demanda, pero existe el creador del mercado que será la propia gestora del ETF, obligada a cotizar en firme operaciones compradoras y vendedoras. Así pues tienen la liquidez asegurada aunque no exista volumen de contratación. Siempre se puede entrar y salir del valor a un precio justo.
¿En qué invierten?
- Sobre índices nacionales e internacionales.
- Sobre mercados emergentes con buenas prespectivas. Suelen replicar los principales índices de China, Brasil e India.
- En Acciones y Bonos.
- Oro, Plata, Petróleo, Materias primas.
- Deuda hipotecaria.
En definitiva replican el comportamiento de un mercado o índice específico.
Otras tipologías de ETF:
- ETF inversos. Estos son los que replican el comportamiento inverso de algún índice nacional o internacional, de materias primas (petróleo – gas – oro), de sectores inmobiliarios, financiero tecnológico etc. o sea que si el mercado cae un 5% usted gana un 5%.
- ETF apalancados. Son aquellos que invirtiendo poco ganas el doble a través de opciones.
Ventajas
- Estás en Bolsa diversificando sin tener que preocuparte de una o varias acciones.
- Puedes entrar en mercados de difícil acceso.
- Si crees que los mercados van a bajar puedes apostar por ello.
Riesgos
- Es un producto de riesgo. Es bolsa. Las ETF pueden dar ganancias o pérdidas según sea su evolución del mercado.
- Para los ahorradores más conservadores que no quieran correr riesgos con su dinero que se abstengan.
Y una vez más, no olvidar las 3 reglas de oro: Seguridad, liquidez y rentabilidad por este orden.