Las dos crisis tienen los siguientes puntos en común:
- Crisis climática. La naturaleza sigue su camino sin que el hombre sepa donde va.
- Crisis económica. El sistema está quebrado. Solo vale el dinero fácil y especulación.
- Crisis demográfica. La inmigración llega para todos.
- Crisis ideológica. Estamos confundidos y ya no creemos en nada.
- Desordenes sociales y políticas que nos llevan a destructivas guerras ( Vietnam, Irak, Iran, Afganistan, África, etc.). A los pobres ya no se les puede sacar nada más.
La crisis social y económica del sigo XVII se ha interpretado como la transición del feudalismo al capitalismo, llevándonos en el siglo XVIII a la revolución industrial.
La crisis que estamos viviendo en este siglo es de esperar que sea la definitiva revolución tecnológica que nos llevará a la sociedad del conocimiento. El vertiginoso desarrollo de las tecnologías de la información y comunicación, por su alcance global, nos traerán un cambio radical en la forma de vivir, trabajar y hacer negocios.
Los políticos y gobiernos actuales siguen alimentando las cinco crisis que he comentado pero la naturaleza es perfecta y está diseñando lo que será el futuro planeta tierra. Vivimos momentos históricos como se vivió en el siglo XVII. Cuatrocientos años no son nada para que este planeta pueda desarrollarse para un nuevo ciclo post-capitalista donde el conocimiento nos debe llevar a que el bienestar social llegue a todo el planeta.
Solo la evolución del planeta en consonancia con nuestra mente nos hará encontrar una nueva forma de vivir. Como decía Peter Drucker «El conocimiento será el centro de la producción de la riqueza.«