Es difícil comprender la lentitud en la toma de decisiones para afrontar la grave crisis económica que tenemos encima. Crisis que afecta principalmente al empresario y a la clase media endeudada que además vive con el miedo de perder su puesto de trabajo.
¿Por qué tanta lentitud?
Como los que nos han llevado a esta situación son los mismos que ahora quieren solucionarla, se me antojan 3 razones:
- Los responsables de tomar medidas no tienen prisa porque esta crisis no les afecta. Al contrario, con tanto trasiego, viajes, tertulias, justificaciones y protagonismos , apoyados por los medios de comunicación, disfrutan de buenas dietas y refuerzan su imagen, puro ‘marketing personal’.
- Es tan grave el problema que a medida que pasa el tiempo, más se extiende y más se globaliza y ramifica. De esta manera, el número de responsables se incrementa, cuantos más sean más se va a diluir su responsabilidad.
- Les interesa dejar que caiga mucho más, como son de los pocos que tienen liquidez comprarán barato y cuando mejore la situación venderán.
Señores, la situación es muy grave. La última cifra que hemos conocido es que el paro se ha elevado hasta el 11,3% y nos siguen diciendo que vienen tiempos peores.
¡Por favor! menos titulares apocalípticos y tomen medidas urgentes que el enfermo está en la UVI.
Bon dia, Josep, sóc la Raquel Balmes, la germana de la Mariona, sóc FAN nº 3, del seu blog, dic numero 3, perque imagino que l’1 i el 2 l’ocupen en Carles i en Miki, jejeje, moltes gracies per aquest blog, a mi personalment m’ajuda moltíssim consultar-lo regularment, salutacions i a reveure.
Hola, José,
Muy acertados tus comentarios de por qué no se actúa más rapidamente.
Ahora bien, creo que la solución va para largo, porque nadie va a obligar a los bancos a prestar dinero ( aunque lo tengan), ni nadie va a obligar a los consuidores a consumir.
Antes, tanto unos como otros querrán tener el terreno despejado, es decir, hay que recuperar la confianza, unos en los otros bancos y en la solvencia de los demandantes de créditos, y otros en la seguridad de que su empleo ( los que lo tengan) no corre peligro.
Y ya sabemos que la confianza se puede perder en un instante , pero se recupera en un plazo largo.
Un abrazo.
Juan Manuel
Hola Raquel.
Gracies per llegirme. Espero que segueixis esent la fan nº 3 ó 4. Una abraçada.